Saturday, July 12, 2008

Ayer salió el nuevo IPhone

No, no me pasé la noche acampando en la puerta de la tienda de Apple. Todavía tengo relaciones humanas que nutrir, responsabilidades que cumplir y una vida por vivir.
Lo que si noté, es que ayer también salió la actualización 2.0 del software del teléfono. Esta provee algunas mejoras interesantes, como mayor facilidad para manejar mails, las aplicaciones creadas para el I-Phone,etc. Pero creo que en al alma de los que nos complicamos la vida con los juguetes, lo más importante es que es una NUEVA actualización. Y si es NUEVA, hay que probarla. No nos podemos detener en minucias del tipo ¨me sirve para algo esto?¨.
Bueno, eran las 8 y media de la mañana. Todavía me quedaba media hora antes de ir a trabajar, mi mente privilegiada razonó, voy a hacer el update ahora. Total, tiempo me sobra.
A las 9 y cinco, tuve que llevar mi laptop y mi modem celular al auto, conectar el I-Phone, y tratar de que todo funcione mientras me desplazaba a la velocidad máxima por la I-10.
Estaba oficialmente descomunicado telefonicamente.
El ostracismo digital cayó sobre mi pesado como injusta condena.
Repasemos los hechos.
El update del Iphone funciona de la siguiente manera.
Primero, se descarga la nueva versión en Itunes. En mi caso, este procedimiento tardó cinco minutos. Hasta acá todo bien.
Después, el programa se instala en el teléfono, y este queda en blanco como la gente que tenía la mala fortuna de comocer a los hombre de negro. El teléfono quedó como salido de fabrica. Sin conexión.
El tercer paso es conectarse a la tienda de Itunes para recuperar los datos de la cuenta y salir al mundo luego de este procedimiento de Botox digital.
Hete aquí el problema.
El nuevo Iphone salió en 70 paises. 70 paises y ninguna flor (perdón). 70 paises, donde la gente se amontonó a esperarlo, como si en el mundo estuviera todo bien y sobrara la comida.
Toda esta gente, al realizar su sueño existencial, activó su nuevo chiche a la misma vez (salvando la diferencia horaria). Los servidores de Apple dejaron de funcionar.
Y yo, me quedé sin teléfono.
Siguiendo mi linea de razonamiento, que hasta ese entonces me trajo resultados fantásticos, decidí ir a buscar ayuda al Genius Bar (nombrado en homenaje a mi, supongo) del Apple store.
Al ver la fila que daba la vuelta manzana, decidí que la naturaleza tomara su curso natural.
El problema se resolvió al mediodía